11 may 2015

Capítulo 87: Un hombre espera en el desierto

Me sustituyen por un gato, no debo de estar lejos, yo por orégano que exige menos trato. La impaciencia pudo con lo romántico, depilarse trae mal fario. Salgo con los gayumbos más feos, porque el código de Murphy es sacrosanto, deje de leer a Chinaski, ni soy un beatnik ni me gusta el whisky, comparto otras dolencias sin embargo... Expongo la fortuna a pecho descubierto. Estoy listo para caer, llevaba tiempo esperándolo, o soy ambivalente o bicéfalo, quédate con lo que más te complazca, pero báilame, báilame... Válgame la sombra de la adolescencia, ¿que orgulloso busca vulnerar y venerarse? Creo que soy yo y no ellas, como ir a la primera cita sin ganas, siempre la anterior te gusta más, es ley de vida...


BlabberMouf - StepInDaJam 




Mira como ruge nuestra grada, no estáis sólos en esta batalla... Sevilla una vez más, llévame a la final, juntos lo vamo' a lograr...


La vida te da siempre oportunidades. Siempre. A veces hasta vuelve, y te pone en bandeja el poder saborear de nuevo algo maravilloso por si en un primer momento por algún casual no supiste hacerlo. Yo no vi a Antonin Polster ni a Biri Biri. Tampoco estuve cuando Bilardo decía: ¡los de colorao', los nuestros son los de colorao', písalo, písalo! Ni con Arza o Campanal. No pude disfrutar de barrilete cósmico, cuando dios se hizo hombre y vistió nuestra casaca, y guardo recuerdos muy leves de Iván y de Davor. Yo empecé con Vassilis Tsartas, mi primer ídolo. Con Pablito Simeone y Matías Almeyda, con Rafa Paz y Nico Olivera. No era nada fácil ni divertido ser del Sevilla por aquí, éramos pocos, casi ninguno, pero no cobardes. Si hubiese habido algo que celebrar no hubiese tenido con quien abrazarme, con quien cantar las incontables canciones que suenan en gol norte y con quien comentar nuestras gestas desde este, nuestro lado de la barrera, desde el que se ve todo de un rojo muy rojo y un blanco muy blanco. Pero no hubo nada que celebrar por desgracia. Los mayores títulos conseguidos fueron las victorias en los derbys contra el Betis, ganar las eliminatorias de promoción y algún título de campeón de segunda división. Por otra parte todo eso nos supo siempre a gloria bendita, ya que no estábamos aquí por los títulos, si no hubiésemos desistido hace ya bastante tiempo, sucumbiendo a los cantos de sirena de los grandes colosos que, más tarde o más temprano acaban levantando trofeos y te llaman para que seas eso, uno más, entre iguales. Acostumbrados a que cuando uno de los nuestros brillaba un poco más de la cuenta acabase por abandonarnos más pronto que tarde, nadie podía soñar con días de vino y rosas, ya que las osadías terminan por romperle a uno lo piños cuando menos se lo espera. Para colmo, y como la alegría va por barrios, en el otro equipo de la ciudad empezaban a hacer las cosas bastante bien y a cosechar éxitos, lo que no hacía más que acrecentar la dificultad de ser colorao', más aún cuando por aquí si que convive una comunidad más o menos amplia y cercana de verdolagas. Aún así, no hay mal que cien años dure. Y hablando de cien, justo por esas fechas en las que uno se vuelve centenario como quien no quiere la cosa, en las que un trovador de estos de pueblo (de pueblo chico) le da por sacársela y escribir el himno más bonito que nadie pueda imaginar, empieza a madurar el fruto al que tanto tiempo dimos mimo y cuidado en las sombras, justo cuando nosotros tenemos la maquinaria y la técnica necesaria para recolectar y disfrutar la cosecha. Hace ya unos cuantos años pudimos vivir los años más gloriosos de nuestra historia, siendo yo ya lo suficientemente adulto como para saber la trascendencia de esto y la complejidad de lo ya logrado y volver a repetirlo. Todos podríamos decir de carrerilla cualquiera de las alineaciones de esos años, y uno no sabía a quien coger de ídolo, cuando años atrás podíamos dar gracias si teníamos uno y sabíamos cual era. Han pasado ya unos años de eso, pero cuando parecíamos haber perdido la senda, de nuevo se volvieron a alinear los planetas y el año pasado pudimos volver a saborear la gloria que supone un título y el salir a la calle a teñir una ciudad entera de un sólo color. Siempre ando preguntándome si algún día, cuando tenga un hijo, podrán ver sus ojos todo esto que yo estoy viendo. Recuerdo con mucha nostalgia y orgullo aquellos triunfos. Sin embargo, como decía, la vida te sigue dando oportunidades, y, lejos de sentirse uno acomodado en el éxito y restarle valor a lo que se está logrando, la dificultad que entraña conseguirlo no hace más que agigantar al mito y hacer que uno no pare de emocionarse con el escudo que llevamos en el pecho. ¿Que es el fútbol si no emoción? Este jueves, volvimos a vivir una noche mágica, una noche para el recuerdo, una más de esas de "y tú donde estabas cuando"... ¿Y tú donde estabas cuando Aleix se disfrazó de Messi? Yo estaba en casa de mi tío, el que me hizo formar parte de todo esto y me metió el gusanillo, con mis primos, a los que intento metérselo yo, como quien devuelve el mayor favor que le han hecho a uno. Con la humildad que nos caracteriza, y acostumbrados a las gestas, los nuestros nos han vuelto a dejar a las puertas de una final, a unas puertas a las que estamos llamando y que debemos tirar abajo el jueves, para que abran paso y guarden respeto al rey de copas. Nos han vuelto a poner el dispensador de gloria en la boca. Queda rematar. Queda no parar de cantar ni un sólo segundo. Queda no parar de sentir, de llorar de alegría, de tener la piel de gallina y la polla dura. Gracias a todos por tanto. Más que mi corazón, ahora y siempre, me late tu escudo.





Magic kids - Desconocido



No Womad no cry. Bien sabido es que las mejores noches y los mejores días son aquellos que surgen de la nada sin ninguna premeditación, y, mientras menos vengan a cuento, mejor. Por eso quizás el sábado ha sido de lejos la mejor noche en lo que va de año. Lo de que coincidiese con mi cumpleaños es tan arbitrario como la gente que se cruzó conmigo aquella noche, totalmente aleatorio, totalmente random. Ya conozco del peligro de salir el sábado a tomar un par de cañas antes de comer, pues no son un par, ni son antes de comer... son antes, durante, y después. No parecía el mejor de los planes lo de encajarnos en Cáceres, siendo las horas que eran y teniendo el domingo una entrevista de trabajo, pero bueno, cuando uno entra en el burladero a collejas lo mejor es agachar la cabeza y andar para adelante sin mirar atrás, no vaya a ser que en vez de en la nuca te las lleves en la boca. Y en esas se da uno una ducha rápida, sopla las velas, toma un pequeño pedazo de tarta y se monta en el coche de Garry sin hacer preguntas pero con el cinturón abrochado. Y así, como el que oye llover y sin darnos ni cuenta estábamos en medio del casco antiguo, atestado hasta la bandera, con botellas de plástico llenas de alcohol, con una mochila que es el bosson de Highs y con la mejor de las compañías posible. Lo primero que hay que destacar es que para poder reunirnos todos, tuvimos que vivir una de esas grandes odiseas que son posibles gracias a mi destreza con las nuevas tecnologías táctiles. El de Mangy es el decimonoveno número que apunto mal en el móvil, creyéndome yo que está bien apuntado, con lo cual lo doy como tal. Esto nos lleva a tener a Garry con el teléfono en la oreja hablando con la desconocida a la que yo felicité el cumpleaños (pensando que era Mangy) explicándole donde estábamos y preguntándole que si iban a tardar mucho. Por lo que se ve nuestra nueva amiga tardó un poco en reconocer a Garry pero acabó haciéndolo (?) y mientras nos decía que iba por Almendralejo (cosa que impactó mucho a Garry porque Jesús nos había dicho hace un rato que ya estaban por Cáceres) apareció doblando la esquina nuestra querida pareja, cosa que desconcertó bastante a Garry que primero pensó que era una broma pero luego se quedó un poco entallado, como todos, descifrando así el gran enigma de porque hacía mucho que yo no lo lograba contactar con MariÁngeles. Nota: si no os contentos los sms, sobre todo a las ex, y no os escribo y eso, es porque tengo mal apuntados los números (no es coña, ninguna de las dos cosas, bueno, la primera un poco). Una vez reunidos ya todos y habiendo dejado los bártulos en nuestra humilde morada durante unas horas, fuimos a picar algo de comer y mientras esperábamos la cena vi a lo lejos una cara que me era conocida pero que no conseguía ubicar muy bien en Cáceres. El caso es que me abrí paso entre la muchedumbre y pude abrazar no a uno, si no a dos amigos tan grandes como viejos. Fayez y el Brujo, que habían venido a Zafra a marcarse unos bailecitos a una competi habían aprovechado para parar en su vuelta hacia el norte y así tuve la suerte de poder ponernos al día a la remanguillé pero con tanta alegría que se me escapaba de las manos. Que bonito es reencontrar por sorpresa a gente que quieres tanto. También vi a lo lejos al gran Julito y empecé a hacer la ola hasta que vino a mi. Lo bueno de ver a Julio es emplazarnos a vernos en Sevilla dentro de un par de semanas para cantar juntitos esos himnos que se cantan en gol norte y poder repasar con tranquilidad tanto nuestra infancia como el estado del panorama actual, y drogarnos, drogarnos mucho. Pitukiiiii! Entre acto y acto la noche alcanzó cotas de humor inimaginables al inicio. Todos y cada uno de los de mi corro allí presentes estaban desatados. Coreábamos los cumpleaños de los que nos rodeaban con un ¡felices catorce!, hablamos de comida llegando a la conclusión de que la palabra 'menestra' debería ser un insulto, rollo, menuda tía más menestra o chúpamenestra, dimos papel como buenos samaritanos (aunque Garry se pensase que fuese papel de escribir al principio negando que tuviese, cuando se estaba fumando un cigarrillo de liar) incluso a niñas a las que Garry preguntó si habían hecho la comunión (a pesar de que lucían casi más canas que él)... Garry, que sin duda fue el alma mater y el que tiró del carro en todo momento, realizó una de las mayores paradojas que he podido vivir en directo refutando que era el tío más rencoroso del mundo siendo rencoroso en ese momento hasta límites insospechados. El peluca realizó el piscinazo más vergonzoso visto en años en medio de la plaza (cuando todos sabíamos que nadie le había tocado). También pudimos parar con Patri (la del pueblo) para recordar otro de esos grandes capítulos de este blog, como fue el de la última caldereta en el corralón en la que todos estuvimos desatados (y de la que hay documentos gráficos, cono en la cabeza incluído). Se pasó volando el botellón, quizás por la belleza del entorno en el que estábamos, quizás por la compañía que nos rodeaba. Y es que cuando te encuentras con la hija de Hank Moody en el Womad, pero en versión guapa, pues uno ya no tiene ojos para otras muchachas (y mira que las había y muy guapas). Si, amigos, otro de esos enamoramientos anónimos míos en los que se me olvida por unas horas que hay más mujeres en el mundo (incluso cuando esta ya se ha ido) y en el que me maldigo por no haberle dicho nada cuando tuve la oportunidad. Bien es cierto que estaba esperando a que el alcohol hiciese más efecto en AJ para que todo fuese más fácil, pero en esas se pasó la oportunidad y me quedé solito y desolado, esperando durante toda la noche poder volver a cruzarme con ella y hacer de Humprey en Casablanca. La próxima vez prometo no fallar. La próxima vez prometo escribir más sobre lo muy bonita que era la chica y como hacía girar la tierra sobre ella cuando bailaba, como temblaba toda la ciudad cuando sonreía o como nacía en mi una primavera sin alergia si miraba de soslayo. Ay Beca... que vida esta. Pero uno no tiene tiempo para amores cuando el mundo debe de ser rescatado, así que proseguimos con nuestra noche en busca de aventuras y electrolatino. Durante el camino pudimos seguir disfrutando de genialidades como ¡ese si que ha triunfado, quiero acabar la noche como él! (mientras pasaba un hombre de unos cuarenta tacos a quien llevaban a cuesta otras dos mujeres de la misma edad porque no podía con su cuerpo), así como normal que le vaya mal si lleva el primer botón de la camisa abrochado o verás que chasco se va a llevar la pobre de que se entere que Mangy es mi novia. Un nivel estratosférico al que no hace falta ni añadirle 'es que contado pierde gracia' o 'si hubieses estado allí'... Acabamos encontrando un local con sabrosura y allí empezó a agonizar nuestra noche, no sin que antes Garry culminase su genial actuación pudiendo tirar abajo la tarima del dj porque le apetecía hacer como que se follaba al peluca (Hugo durante toda la noche) dejándose caer sobre una especie de andamio que no tenía mucha estabilidad. Volvimos a casa a duras penas, perdidos por las calles de Cáceres pero teniendo una de esas conversaciones para la historia y maquinando futuros planes que llevar a cabo, pero dejando mucho margen de maniobra, para que nos queden tan bonitos como este improvisado. Give me the way! 








La contradicción tiene cabida en cualquier ámbito, pero el sinsentido es dañino, llegan con sordina y te dejan con sordera, busco un hueco en la ciudad y rellenar el de mi cuarto, nos hacemos mayores supongo... ya no puedo vivir sin sex. La vida es un regalo, te gusta si me encuentras un sentido si no varios, si no es un cargo. La grandilocuencia molesta como el silencio, o eres necio o arrogante o antipático, yo empatizo con apáticos, me subo en bajones. Salgo a la calle a dar un voltio a los cascos, tampoco pido tanto, una Fonda, Dunaway o Farrow, una que cante folk, tengo a Dustin Hoffman colgao' mirando la función, antes tenía tiranosaurios. Se van de mi vida pero al menos tienen claro que es el plus, no se cuando cedí mi almohada buena. 

Un año y otro año. Volvió Mayo y ya saben que en Mayo, aparte de la alergia, lo que también vuelve es esa fecha en la que uno añade otro digito a su cuentakilómetros. Un día y otro día, sólo que este año si que pude pasarlo en mi tierra y con los de toda la vida, cosa que en todos estos años anteriores no pude hacer. No ha sido un día para el recuerdo, no ha habido regalos (ni creo que hubiese sido justo a estas alturas de la película) aunque ha habido tarta y velas, ya que por casa si que se estila mucho esto. Siendo sinceros, y ya me parece vergonzoso por mi parte, hasta me llegaron un par de sms de números que ni tengo pasados a la agenda. Ya me vale. Esa es mi tara, no ser más equitativo. Luego me quejo. Poco, pero me quejo. Pero para lo que si sirve un cumpleaños es para hacer un poco de balanza y balance. Una vez pasado el cuarto de siglo, así como de golpe y porrazo, uno ya si debe de hacer las cosas de otra manera, o por lo menos hablar de otra manera. Hay quien se niega a ello, y una parte de mi sigue en lucha latente por ello, pero si que es cierto que hay otra que ya ha asumido hace tiempo que esa etapa de la vida, la más bonita sin duda, ya pasó, y que ya es momento de pasar a otra en la que las pequeñas satisfacciones son las que tienen un peso más importante a la hora de equilibrar la felicidad de uno. Como os dije, eché un ojo atrás, no mucho tampoco, hasta Enero, y vi que todos esos propósitos y planes que tenía, a casi mediados de año, no son más que una casa en escombros que en ningún momento me he encargado de mirar, ni mucho menos de intentar levantar. Tan importante es hacerse consciente de, como erigir. Si que es cierto que hace mucho que no tengo problemas con nadie, pero no es menos cierto que si que me agria el carácter según que conductas de la gente, según también que recuerdos. Todavía no he conseguido dominar esa parte interior mía, como no he conseguido nivelar el karma, ni hacerme consciente el mayor tiempo posible, ya que, si lo consigo, es esporádicamente y a priori no tiene nada que ver con nada que yo haga, diga o intente. La verdad es que me entristece. Hablando con Jesús en Cáceres de otro de esos grandes amigos que tenemos en común y que hace mucho que no vemos y del que dejé de saber hace tiempo, me comentó que había estado jodido con problemas psicológicos. Estrés, presión e incertidumbre. Welcome to the jungle que es el siglo XXI. Y reflexionaba Jesús de que siempre estamos inconformes y quejándonos de lo que no tenemos: si tenemos trabajo nos quejamos porque estamos agotados, si no, porque no lo tenemos, si tenemos pareja añoramos la soltería y si estamos solteros echamos en falta alguien que nos complemente, y así con todo... Este tema de conversación es bastante recurrente últimamente allá donde peguemos el oído. Quizás el primer paso para aceptar un problema sea reconocerlo, quizás le venga bien eso a esta sociedad enferma. Resulta bastante paradójico que a las alturas de historia en la que estamos, con los medios que tenemos para llenar de sobra nuestra pirámide de necesidades, sea cuando mejor se vive pero menos feliz se es. Quizás haya que hacer algo, quizás sean sólo elucubraciones mías, que yo de un tiempo a esta parte no soy el mismo, vaya usted a saber. Con todo y con esto, una vez habiendo mirado la piedra de mi zapato, procedí a mi costumbre de lanzar piedras a la gente, al sistema y al destino liberándome de toda culpa que no me permitía lograr los objetivos (y deseos) que me había marcado a principio de año. Pero como yo soy muy mío, y para que vean que no esquivo el envite, me he hecho una nueva lista que dependa sólo de mi llevar a cabo (en mayor o menor medida), y la pienso cumplir, palabrita. Me ha llegado una carta escrita a mano por alguien que me quiere tanto como yo a ella y que esta vez ha sido la encargada de recordarme que tengo mucha gente detrás que si que sabe como valorarme (gracias por los tickets). Una de las chicas más bonitas del sistema solar me ha regalado un beso por mi cumpleaños. Tengo una chapa de Totti que le pienso regalar nada más llegue (ya sabéis de quien hablo). Sigo teniendo un boli, un folio y las ideas claras ¿quien de los que está hoy aquí se va a rendir?





Déjame, me sobran tres cuartos menguantes. Caminaré, con paso firme pero errante. Nace la primavera en estos jardines colgantes, me sobra con sonar elegante...

Manín - Los jardínes colgantes [prod. Dj Skut]

5 comentarios:

  1. Perdón por el retraso, ya saben como está la ciudad, llena de claxons...

    Hubo problemas con la maquinaria y la logística, pero quería regalaros los jardines por mi cumpleaños, por eso me atrasé un poquito. Espero sean transigentes con servidor.

    Merci.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Yung Jimmy on the track
    Trynna make it new without forgetting what's back

    PD: Épico lo de no poder editar un puto comentario. Mandadme otra puta carta desde Jamaica, Google, no os tengo miedo, este blog es mi puto rincón y lo defiendo a muerte como Bodie.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yung Mvnin les deja el culo prieto manito, y pronto nujotros.

      Eliminar