29 dic 2014

Capítulo 68: Volveremos a encontrarnos


Ricky hombre libre - Pura vida


 


Una de las cosas que más me gusta me gusta de estas fechas es que al congregarnos por el pueblo todos los emigrantes, las posibilidades de que ocurran anécdotas dignas de mención y que perduren durante mucho tiempo en nuestra memoria aumentan exponencialmente, y, por ende, se producen muchas más de las que suelen tener lugar de manera random. Aún así, nunca se superará el nivel de los entes autóctonos, y es que los de Vca nos empeñamos en dejar el pabellón lo más alto posible. Uno de mis mejores colegas (leen bien) acudió a los medios informativos de nuestra pedanía, concretamente a los radiofónicos, a dar una masterclass sobre baloncesto, cultura en general y dominio sobre una situación límite como es tener a un grupo terrorista acosándote. Además, tuvo tiempo para mandar un saludo a todos sus oyentes, y en especial a su grupo de amigos del que me siento orgulloso de formar parte. Por si fuera poco, hemos retomado una vieja costumbre que nos ha proporcionado momentos que pasarán a la historia: el noble y antiguo ejercicio del freestyle. Y digo hemos porque no sólo yo he vuelto, ya que el jefazo de Pepe se ha unido a este arte de las canciones inventadas. Dicen que la risa alarga la vida, y, de un modo u otro, con este chaval habré ganado años y años, y esta semana, más aún. Gracias, ídolo.




Vuelvo a tenerlos a todos por aquí, a todos y cada uno de ellos, aunque sólo sea puntualmente, aunque sólo sea una noche. He vuelto a otro de esos rincones de culto como es Bodeguita Lavija, desde 2008, a encender la candela (donde ya no duerme mi perro), a sentarnos en torno al barril de cerveza y a comer unas patatinas mientras mis compadres dejan caer (o posan) una tras otra todas las vivencias de este tiempo atrás en las que no hemos podido disfrutar de la presencia de los otros como el que saca su baraja de naipes (diferente de la de los demás) y coloca con mucho mimo elevando su castillo cada una de las cartas con el máximo cuidado para que ningún movimiento, o el viento, lo tire abajo en un descuido. Nosotros no cogemos las cartas de nuestros compadres y las colocamos a nuestro antojo, porque lo haríamos a nuestro modo, y, aunque en algunos casos quedarían bastante bien, cada cual debe de erigir su castillo... pero si que es cierto que observamos desde fuera y avisamos cuando se tambalea un poco, y una vez pasado el tiempo, cuando con perspectiva participamos de la belleza, aplaudimos y reímos todos juntos. Supongo que para ese tipo de cosas estamos vivos. 

La noche de nochebuena lo único que tiene de la palabra es noche, porque de un tiempo para atrás, por muy buenas intenciones que traigamos todos nunca conseguimos tenerlas en paz. Supongo que todas las familias suelen excusarse en que todas las cenas de puertas para dentro son así, que en todas partes cuecen habas y que lo demás son sólo máscaras de Venecia. Probablemente no les falte razón. Por aquí llevamos acumulada la tensión de unos años bastante complicados y cuesta estar en armonía sin que en alguna de las conversaciones se dejen caer reproches o se critique la forma de ser, o pensar (que no se que es peor) de alguno de los componentes. Todo esto no pasaría si la gente no tuviese la estúpida costumbre de beber antes de las cenas, que me parece perfecto que se salga a media tarde a celebrar con la gente que no te toca nada en la sangre lo maravilloso que es todo y a contar mentiras sobre cuanto nos queremos, la de cosas que vamos a hacer y lo feo que es el mundo mientras miramos para otro lado, pero no hay necesidad ninguna de tomarse más copas de la cuenta y llegar con ganas de jarana a la cena, que si todos los demás estuviésemos mamaos pues perfecto, pero que si no lo estamos y luego desde la lucidez se dispara a discreción pues válgame, esto ya estaba roto cuando yo llegué. Al menos la cena de este año estuvo de puta madre, ya que no nos dejamos guiar por convencionalismos e hicimos de cenar lo que nos gusta y no movidas rebuscadas que quedan preciosas y que al final nadie se come. A posteriori, me fui a celebrar con mis colegas el hecho de que nos juntemos de nuevo, nada que ver con el cumpleaños de un personaje histórico que ni siquiera se si sería amigo mío de ser contemporáneos. Un año más canciones de Mecano y de Alaska, un año más compartir cultisetas con Juan y sus colegas, un año más de purinos (que yo este año no consumí), un año más en el que la gente cada vez viene más arreglada y las conversaciones son más serias, con todo lo que ello conlleva. Fue una gran noche porque no puede no serlo cuando estamos todos, a pesar de gastar un par de horas en el Abuelo sin que hubiese nada que destacar, a pesar de que creo que he perdido el puto abrigo con quince euros dentro, sin que vaya a explicar el suceso por aquí porque no merece la pena. Con todo y con esto empezamos a pasear el jeto en el antro por excelencia de mi pueblo, lleno de gente feliz, pero sobre todo, con mi gente feliz. Y fue genial. No paramos de hacer el capullo en todo lo que quedaba de noche, marcándonos unos bailes que quedarán para la historia (momentazo deadmau5, momentazo bamboleo). No recuerdo anécdotas porque no pasaron hechos puntuales, pero todos los flashes que tengo en mi cabeza son de ver a mucha gente que amo riéndose mucho, muchos abrazos y besos. Mucho. Y muy bueno.




A estas edades, las tradiciones que de chicos nos llenaban de ilusión se miran con cierto recelo, quizás por el hecho de que te obliguen a renunciar con la edad a esa alegría (material, tiene cojones) que te dispensaban los adultos, y que nacía de una mentira. Yo hace tiempo que dejé de creer en los tres de la realeza de Oriente (y en el ratón Pérez) y quizás haya dejado de creer en ellos más por pulsión que por convicción. Pero que mis tradiciones no existan, no quiere decir que el resto de tradiciones de países no sean ciertas, y allá por escandinavia, un gordete canoso y barbudo, al que llaman San Nicolás (vaya nombre tan de moda en España) también se dedica a dejar presentes por las casas, no se muy bien a santo de que. El caso es que se ve que este chavalín me conoce mejor de lo que pensaba, y en lugar de dejarme ningún detalle en casa, me lo ha dejado en el hogar de alguien a quien quiero mucho. Por lo que tengo entendido esta coleguita le pidió algo para mi (no debo de haber sido tan malo este año), y, una vez recibido el regalo, me aventuraría a decir que o bien esta persona o bien el nórdico sabe de primera mano lo que me gusta, y sabe de esas pequeñas cosas que a uno le hacen ilusión. Pero sin duda el mayor regalo ha sido poder contar con esta personita de manera mucho más activa este año que toca a su fin. Si me pongo a recordar todos los momentos importantes, no falta en ninguno, ya sea riendo a mi lado o echando un cable cuando se han fundido los plomos, y esa es la gente que me gusta tener cerca en mi vida. No creo que haya sido casualidad, siempre hemos tenido un feeling especial y ese tipo de cosas con el paso del tiempo se consolidan y se asientan. Disfruto mucho cuando la tengo cerca, y es una de las suertes de mi vida. Seguro que lo que se viene es mejor de lo que ya ha habido. Gracias.



One path - Now or never






Tener a Germán por casa ha sido como tener a ese hermano pequeño que nunca tuve (en cuanto a contenido, no en cuanto a continente, nadie podría tener un hermano mejor que Alejandro, a pesar de Alejandro) o en su defecto tener una versión mía más pequeña pero mejorada. Llevaba mucho sin verle, de hecho, han pasado muchas cosas en mi vida desde entonces, pero no ha dejado de estar en todo este tiempo. Si el motivo de nuestro reencuentro es plasmar lo que más amamos, y encima lo podemos hacer en mi jardín y puedo enseñarle un poco el entorno (que al fin y al cabo es en gran medida culpable de ser lo que soy) tenemos motivos más que suficientes para hacer una fiesta. Han sido días productivos, y días profundos. A veces se me olvida que llevo mucho más camino recorrido (por edad, que no por condiciones) porque él consigue que se me olvide. Al tenerle por aquí he recordado mucho los días en los que tuve a Óscar, y me he acordado también mucho de Juanmy. Nos ha sobrado tiempo para repasar, analizar y diseccionar todo contenido acústico y visual que ha proyectado nuestra cultura estos últimos meses, nos ha sobrado tiempo para hacer planes, para hablar de futuro y de pasado, y para conocernos, cosa que parece que se nos olvida que debemos hacer porque por momentos parece que llevásemos toda la vida juntos. Se sabe mis letras mejor que yo (y esto no es coña, y se sabe hasta algunas que ni hemos grabado), y es un botón muy significativo, así como que haga suyo, tanto como yo, y de la misma forma, el concepto de crew. Para más inri, la evolución que sufre cada vez que le veo tras mucho tiempo es mayor y mayor, y aunque le queda mucho margen de mejora, es precisamente esa velocidad (aparte de la certeza de que son correctos) a la hora de dar pasos lo que le pone en disposición de poder hacer cosas muy grandes más pronto que tarde si se mantiene constante y disciplinado. Pero no todo es seriedad, también nos ha sobrado tiempo para que el conociese a mucha gente que yo quiero mucho y bien, para que me viese con los míos más allá de Salamanca, para que estuviese en mi hogar y entrase en mi cuarto, donde pocos entran. Quizás ahora comprenda muchas cosas mejor, quizás se plantee otras nuevas. El caso es que hemos vuelto a poner otra piedra en el camino y dar un empujón fuerte a esto, y con vistas a dar muchos y mucho más fuertes en lo que se va viniendo. Cerrando ciclos con el almanaque, abriendo sendas.



Viernes, sábado y domingo. Días maravillosos desde el primer minuto del primero hasta el último suspiro del último. Siempre que esto suele ser así, más que por hechos concretos, que suele pasar, o por entornos, que también, es por personas. A día de hoy, y tras muchísimos años, si me siguen preguntando por mi mejor amiga no tardaría ni un segundo en pensarme la respuesta: Laura. Creo que muchas cosas tienen que cambiar y mucho tiempo pasar para que esta respuesta cambie, y no porque no goce de gente increíble del género femenino a mi lado, sino porque ella ha sabido estar de una manera única desde el primer día, y, pese a que de un tiempo para atrás estamos un poco distanciados por devenires de la vida, sigue siendo sin duda la más especial de todas (ahora estoy hablando con ojos fraternales eh, nada de empujones). Y a Laura no la  veía desde brrrr o más. O más. Demasiado sin duda. Por eso cuando tengo la oportunidad de espachurrarla y de ponernos al día en directo voy corriendo al calendario y hago un gran círculo rojo. Lo de trollear es ya otro nivel. Espero poder volver a verla antes de que se vuelva a ir, más tranquilamente y volver a darle achuchones y besitos (fraternales). También vino Petxu, y ver a Petxu es ver la cara de la muerte desde verano, cuando pudimos fallecer en accidente de tráfico, pero una mijina más hinchao' y más feliz, lo que hacen las mujeres... Si a estos dos, le sumamos la tripleta de la Vca sucia, véase 'el repión', 'mastina' y 'big poppa' pues... poco puede faltar para que la alegría sea completa. Corrió la cerveza como fluye el Ghanges, las tapitas, las puyas y demás, en bares de culto, en rincones que nos pertenecen. Más tarde café, unos zumos, rapeos... Se unió Gonzalo, otro de los grandes del pueblo, y fueron cayendo como se fueron uniendo otros, como se unió el sábado DF y pudimos unir a gran parte de la 13km al completo, tras haber grabado por la mañana. Y yo aunque lo digo poco se me pone el corazón muy bonito cuando tengo cerca a mucha gente que quiero y encima se juntan. Hacer de puente entre personas es casi más bonito que hacer de puente de ideas, eso es verdad. Si me paro a pensar lo que pediría a la vida para ser feliz, dentro de que se ser feliz con lo que hay, mucho de ello lo he tenido en enormes cantidades esta semana, y lo mejor es que he sabido apreciarlo y valorarlo en su justa medida, que no es ni mucho menos poco. ¿Que puedo decir mi negro? A los que aparecéis, y a los que no, dejaros ver más, que se os echa de menos, y se os quiere. Mucho.







Joe Cocker - With a little help from my friends (rip Joe)


22 dic 2014

Capítulo 67: Me he sentado a esperar

RColmo - 5 de enero





Que alegría me produce el poder compartir con ustedes algo de un hermano. Y es que, este personaje que pasea ahí arriba es muy culpable, sin él saberlo, de que yo a día de hoy escriba como escribo, porque fue durante el año que conviví con él una figura y un ejemplo a seguir por constancia y buen hacer, así como por cercanía y sencillez, cuando yo todavía no había empezado a empuñar el arma más peligrosa que existe. No sólo compartimos música, por supuesto. El primer año en Sevilla fue maravilloso a pesar del naufragio, y estuvo cargado de vivencias y de personas bonitas en todos y cada uno de los minutos que pasee por allí. De hecho, es el único pibe que va a colaborar en mi primer largo, y eso es algo que tiene mucho más valor del que puedan creer. Ha vuelto al micro y yo me congratulo por ello, lo celebro y brindo, y espero poder darle un abrazo fuerte este año próximo que va a entrar, sería uno de esos grandes reencuentros con los que suelo deleitaros. Esta semana me volcarán Galaxies mezclado por completo, y lo escucharemos todos juntitos con un litro. Pronto lo compartiremos, y os haré participes de un pedazo de mi, ya no queda nada. Mientras tanto, algunos en la distancia corean lo que hubo, por lo que habrá, y yo les siento cerca.



Están hablando de lo que fumo, ya ni comer fruta es sano, ya ni tener niños une, vivo estado mental Vostok 1, atmósferas lisérgicas bajo un foco cenital, niños juegan en el córner, pero han prohibido jugar en el córner los nuevos órdenes. Esconden píldoras bajo tu almohada, hijo ten cuidado con el hombre que dice que sabe. Volcanes de hielo bajo mis párpados. Puf! Puf! Pas! Lejos de hombres azules. Fallos en tu código genético y sentimientos que acabaron siendo logotipos. La esencia dentro, el plástico fuera, como un fardo. Blancatas con ganas de juerga como Beastie boys. Intergalácticos.

Yung Lean - Yoshi city




Cuando escribo en el silencio de tu risa maldita, estoy rozando con mi lengua de serpiente tu piel, vivo mordiendo con veneno y se derriten mis manos, aquí sentirse humano tendría que ser ilegal. ¿Sinceridad? ¿En serio la queréis? Está prohibida. Llantos de niños con arpas y liras, y una niebla fría, asulfatada, y esta jodida puta niebla fría que no para. Yo no hago rap, yo asesino. Un grito sin voz, en cada bolo me quemo, no hay freno, esto es lo peor y es que por mi dejaría de vivir ahora mismo, pero he preferido escribir que al fin y al cabo es lo mismo.



Bonita y prolífica semana, sin duda, y es que estoy rematando este año que va llegando a su fin más en forma que nunca, y la verdad es que el que haya unas fiestas en las últimas páginas del almanaque para poner fin, puede transformarse en un plus más que en una tara, como ha sucedido de un tiempo para atrás. En las prácticas se puede decir que he terminado con mi proceso de adaptación y aclimatación al entorno de trabajo. Cada vez voy realizando más tareas y ganando responsabilidad, así como entrando en más áreas de trabajo. He comenzado a trabajar con cámara y a montar colas y cebos que se han emitido. Los compañeros son bastante majos conmigo y estoy aprendiendo mucho. Por Mérida la vida transcurre tranquila. He asumido que es un lugar de paso y que ni voy a anidar ni a echar raíces, de ninguna de las maneras ni formas posibles. El piso no es que sea la alegría de la huerta, aparte de que salgo poco de mi habitación porque necesito bastante de mi espacio ahora mismo, y la vida transcurre dentro de una fuerte rutina que quizás no me venga del todo mal. No salgo de fiesta porque ni me gusta ni lo necesito, ni conozco nueva gente porque ni me gusta ni lo necesito. Los jueves son el mejor día entre semana porque los gasto con mi compadre DF, y son como una especie de homilía que tenemos por costumbre en el jazzbar, poniendo en orden todo lo que desordenamos el resto de días. Me flipa que vaya recuperando el ánimo, se le nota hasta en el color de piel, está más morenito. Parece que los submarinos, aunque estemos hecho para navegar por las profundidades (no nos gusta lo superfluo), si queremos sabemos y podemos salir a flote. Este viernes volví a mi rutina de colegiado, y eché la tarde en Berlanga desenvolviéndome con solvencia en mis labores. Pitar a chicas es una auténtica gozada; no sólo no se cagaron en mi puta madre ni en mis muertos, así como no amenazaron de muerte, que suele ser la tónica en estos mundillos, si no que para colmo tuve un club de fans en la grada que lejos de animar a cualquiera de los dos equipos se pasaron todo el partido dedicándome piropos, cánticos y pidiéndome el número de teléfono. No se lo di porque no tengo whatsapp, por supuesto, pero si vuelvo por aquellos lares, como me tocará juzgarlas de nuevo (por eso de que eran el equipo juvenil) lo mismo me echo un par de amigas nuevas. Para terminar la noche nos fuimos de 'selfies de irse de copas' MJ, Gonzalo, Marina, el gran Big Poppa y servidor. Muchas risas y gente con la que se te pone el corazón contento con simplemente estar. Rematé el finde con Threes, MJ y Pepe, echando unos cafés y con unos freestyles por parte del gran chico Laja que pasarán a la historia, por contenido, contundencia y musicalidad. Para el recuerdo. También tuve la suerte de conocer a Carmen, aunque llamarlo "conocernos" es un poco osado porque sin duda fue un encuentro en el que parció que fuésemos colegas de toda la vida. Una chica maja y bonita donde las haya, interesante y de las que hacen música al andar. No dejo de sumar y sumar. Y lo mejor de todo es que si de aquí para atrás llevo un tiempo pintando bonito, lo que viene de acá para adelante, sin ser el paisaje más bello que he visto, he descubierto nuevas técnicas para enseñároslo así. No dejo de ser un tío normal y corriente que de vez en cuando provoco según que cosas, no tiene más ciencia. Superpoderes.




Hay cicatrices en mis manos y una guerra en mi paz, mi paz no existe, el silencio me trae libertad. El humo del cigarro tranquiliza mis ansias, la fragancia del estado que roba mis ganancias. Una vez más, perdido buscándome en la calle, ego-ísta, ego-céntrico, ego- yo que se no ralles. Sólo soy un raper, ni siquiera lo hago bien, la imperfección y mis defectos me hacen único y seguir en pie. No me sigáis, no me oigáis, odiadme... hay trescientos grupos fuera yo no necesito a nadie. ¿Como osáis profanar el descanso del guerrero? Tu derecho a hablar se acaba cuando criticas lo que más quiero.

Foyone - Ascensión

15 dic 2014

Capítulo 66: Un color especial

Al final resultó que las prácticas no eran los padres y que es verdad eso de que voy a tener que estar hasta el siete de Marzo por tierras emeritenses yendo todos los días a trabajar de gratis, quien me lo iba a decir... Y empecé, como empiezan las cosas que no tienen mucho sentido. Me recibió mi tutora, que es una mujer preciosa, como hacía eones que no veía una, a la par que simpática y agradable. Me dijo que me iban a dar todas las facilidades del mundo para que realizase las prácticas con un horario flexible, para que pueda aprender lo máximo y rentabilizar estos meses de la mejor manera posible y me enseñó todas las instalaciones así como me presento a todo el equipo de producción y post-pro, edición, montaje, grafismo y realización, la cual va a ser mi isla estos tres meses. Me enseñaron el mecanismo de funcionamiento del Dalet, que es el programa con el que vamos a trabajar (y al cual me hice en menos de un par de horas) y asistí a mis primeros directos desde control de realización. El primer día en CanalEx, Monago anunció que Woody Allen dará un concierto en Badajoz. ¿Casualidad? No lo creo. El segundo día ya emitieron un cebo que yo había realizado y el tercero más de lo mismo, por lo que es muy probable que esto sea una constante. También me moveré con los operadores de cámara bastante, e incluso quizás me pase por grafismo. En esta primera semana me lo he pasado increíble, y, lo que es más importante, he aprendido muchísimo más que en dos años de clases, lo que son las cosas. Creo que ha sido una de las mejores elecciones que he hecho últimamente, y cuando lleve un tiempo y coja confianza con la gente se me terminará por dar la razón. Ahora mismo sólo tengo como objetivo hacerme coleguita del chaval que da el tiempo en las noticias que es el puto amo y tirarle los trastos a la presentadora del informativo, que la veo más accesible que mi tutora. Ya os empezaré a mandar mensajes subliminales en frames a través de CanalEx, chavalada.


He disfrutado durante casi dos horas como un auténtico enano viendo Samsara. Casi tanto como estrenando las gomas nuevas, no se me ha quitado la sonrisa en ni un sólo momento. No se como algo en lo que no aparece una sola palabra puede decir y sobre todo, transmitir, tanto. Me puso la piel de gallina y consiguió que me picase la cabeza mucho mucho, y eso es muy buena señal. Colores y sonidos, y espíritu. Y lágrimas. Os lo recomiendo muchísimo, miradlo con los ojos que tenéis dentro de vosotros, y veréis muchas cosas de las que os hablé hace un par de años... Paz.


En Sevilla pude disfrutar del maravilloso Juanminola, al que le hice entrega como mánager y líder de la 13km de su sudadera de la crew y de la camiseta de los Deep Keepers (grupo del cual también soy mánager y líder de la emblemática banda). Y nos dimos un abrazo de esos que pone en pie a la grada. Nos tomamos unas buenas cervezas como mandan los cánoners allá por Sevilla y empezamos a poner a punto la última etapa de Galaxies. Ya están los dos skits, y sólo falta por mezclar un par de canciones, exportar, escuchar y reposar, pulir y limar y... mandar a fábrica. Es un proceso que se podría hacer casi que ya pero que probablemente optemos por dejarlo hasta Enero, por no andar corriendo ya al final y porque nos parece una forma muy bonita de empezar el año. Y estuvimos ordenando todo lo referente a la crew y proyectos, repasamos el panorama y pusimos a todo rapero que esté en pie a parir, desguazamos nuestras vidas y nos reímos mucho, como siempre. Y es que lo que tenemos Juanmy y yo, y mi crew por extensión, es de gran calibre. También pude pasar buenos ratitos con el compadre con el que comparto sangre y con su cónyuge, y joder, me vengo para atrás muy muy contento, porque jamás había visto a este tan centrado (espero que no lo lea), con las ideas tan claras y con tanta madurez (para lo que es él quiero decir, eh). Y creo que mucha culpa de esto, que no toda, la tiene la señorita Cojín, con la que se ve que tiene eso de lo que yo tanto suelo hablar y que se palpa nada más lo tienes cerca, desprenden una vibrata que flipas, y yo me alegro sobremanera de que los chavales de mi vida tengan tan buen gusto y tan buena suerte a la hora de elegir las chicas que les hacen felices. Ójala volver a verla pronto y volver a verla mucho y presente por la vida de todos, y ójala que este siga así y le empiecen a salir el resto de cosas que se tienen que poner en orden para que la vida descienda tranquila por su cauce. Además dice buenohijo, eso es que es de verdad. Por si fuese poco, tuve a un par de villafranquesas de esas buenas de pura cepa de las mías con las que siempre estoy trolleando y me lo paso piruleta piruleta. Dos findes seguidos con ellas es un auténtico regalo. Y encima este muy rap. El tiempo sigue pasando y cada vez nos conocemos más y mejor, hay más cariño y vamos creciendo juntos, compartiendo más momentos y anécdotas y con más y más feeling. Debería de valorar mucho más todo lo que tengo (que no lo hago ni mucho menos poco) porque realmente soy un tipo muy afortunado. Teníamos que habernos echado fotos y eso, cáspitas. Bueno, vosotras dos sabéis de sobra que estáis aquí, y, mucho mejor que estar aquí, estáis siempre conmigo, como Laurita. Todo lo demás se desarrolló como supongo que se debía desarrollar, supongo, recalco. Tampoco voy a hacer mucho juicio de valor ni conjetura, ni tampoco tengo nada que comentar. Siempre supe que el tiempo lo puso todo en su sitio y es lo que tengo pensado hacer, dejarle trabajar a su antojo.



Me levanto con el rap, desayuno con el rap, soy rap, pongo rap, oigo rap, escribo rap... sabes que ando todo el puto día con el puto rap, mis colegas por mi culpa han acabado odiando el rap.

Y si la semana pasada hablaba de lo que suponía todo esto más allá de la máscara, esta semana hice mi particular peregrinación a la meca y mi propio Ramadán. Y te sigue mereciendo la pena dejarte el dinero de unos cuantos fines de semana en el viaje y la homilía con tal de entonar cánticos, himnos que son y serán eternos, que significaron y significan tanto. A mi se me rasga la garganta y me sale sólo entero cada vez que coreo Brindemos o Rap, y me la flipo con Sol sale cada día y con La poesía del hombre pobre. Si me lo amenizan con el Jazz elak olé que no gozaba en vivo desde dos cero cero siete y con temas nuevos que reventaban la sala, uno la verdad es que se vuelve feliz y lleno, y cualquiera que estuviese en la sala y me viese la cara puede dar fe de ello. Luego ya ve uno que el rap sigue en el pleistoceno, que el público no madura, no tiene criterio, y entiende todo eso del negocio, las envidias y la escritura fácil, pero ese es otro debate, todos cometimos errores en su día, sólo que hay que aprovecharlos como trampolín y no como sofá. Quedará para el recuerdo el saludo a Jorge Gascón: ¡Jorge Gascóoooon, es el mcccc... na' tio que estaba aquí en mi keli tocándomela poniéndomela morcillona! Códigos y esa mierda, cuando tocaron tr3s monos allá por el siete toda la peña se la flipó con H-Mafia, y ahora que el nivel ha descendido para hacerse accesible a todos resulta que parece que les entra mejor, nada nuevo en el horizonte. Yo me vuelvo contento, y no por lo que hubo, si no por todo lo que para mi implica, al fin y al cabo es realmente por ser como soy y ver como veo las cosas por lo que he de dar las gracias realmente. 

Porque diez años después sigo pensando en el rap más que en to's vosotros vamos...

Erik Urano & Zar1 - Gorriones



Cinco años son muchos más que muchísimos y muchísimos más que más, y a veces hay rincones en el pecho que abandonas y a los que le crecen flores silvestres. Pero si el sendero es de doble vía siempre puedes volver sobre tus pasos, por mucho que tengas la espalda mojada o los pies descalzos. Este fin de semana he vuelto a otro de esos lugares comunes, y a mi me encanta llamar lugares a ciertas personas. Hablar de Chío es hablar de Sevilla y viceversa, y cuando uno tiene el corazón bonito la vida se lo devuelve en forma de pequeños detalles, como el poder disfrutar de alguien a quien he querido y quiero de una manera especial, como el color. Disfruté de su presencia mucho menos de lo que me hubiese gustado, pero esa es una obviedad porque todo tiempo hubiese sido poco. Ni siquiera me importó que la ciudad más bonita de España no parase de llorar en todo momento y yo me calase hasta los huesos, tanto de manera literal como metafórica. Y le invité a un café, que es lo que yo suelo hacer como eucaristía con las personas que amo siempre que me es posible, porque me permite hablarles mirándoles a los ojos y con el corazón desnudo, y, en muchas más ocasiones de las que quizás merezca, disfrutar en directo de sonrisas, y la suya la tiene muy pero que muy bonita, su sonrisa es un striptease, un collage de imágenes entrando en tromba. Supongo que a los que nos han roto algo dentro sonreímos a bocajarro y eso es como si todos los fuegos artificiales del mundo explotasen a la vez, y esta vez no me tapé los oídos como suelo hacer desde niño. Nuestros caminos se separaron hace mucho y sin embargo han seguido mucho más paralelo de lo que cualquiera de los dos podríamos haber imaginado. Y la verdad es que hubiese sido fácil preverlo, ya que siempre estuvo tan loca como yo, con todas y cada una de las acepciones de la palabra y con todo lo que ello implica. Es bonito poder decirle sin dubitar ni titubear a otra persona a la cara que te quitaron la ropa y cualquier cadena que tuvieses no te fueses a suicidar, te pusieron un pijama y te ataron a una cama, y que la otra persona te mire con esos ojos que sólo te pueden mirar cuando también han pasado por eso, cuando todo tu mundo y convicciones se han venido abajo, cuando no crees en nada, ni en tus padres, ni en tu dios, ni en ti mismo, cuando no sabes si recuperarás lo que ya ni siquiera sabes si has tenido, cuando sabes que nadie te va a entender y ni quieres que lo hagan. Entonces, entonces es cuando estalla la magia y un "te entiendo" cobra todo su sentido, porque no es un "te entiendo", es un te comprendo y te comparto. No dista mucho su experiencia de la mía en ese sentido, como tampoco difiere mucho de mi en el plano sentimental, ya que ella tampoco ha sido suficiente hace poquito y tenía sus cicatrices tan a flor de piel que se las soplaba un poquito para que le fuese más liviano el dolor aunque escociese. A mi me dieron muchas ganas de besarle las cicatrices, pero bastante tengo con echarle sal a las mías, así que hice todo lo posible por aliviar las suyas, ¿y saben que? Creo que lo conseguí un poquito. Últimamente tengo ese don de sofocar una miaja el pesar de los demás, más allá de las expectativas que tengan para conmigo, cosa que yo no puedo gestionar... pero si se viene a disfrutar de lo que dispenso más allá de lo que esperen de mi, se suele ir uno lleno, o al menos yo lo palpo. Le hablé de Salamanca y ella me habló de sus viajes este verano. Hablamos de destino y de espíritu sabiendo que hablamos de lo mismo y que tenemos conceptos muy parejos, más allá de que cada uno tengamos nuestros matices. Le dije que echaba de menos su ceceo tanto como las arruguinas que le salen sobre los mofletes cuando sonríe y ella me dijo que echaba mucho más de menos de lo que yo podía echar todo eso el que la llamasen Chío. Y como el amor o esas cosas nos dan hambre conseguí engañarla para que se viniese a comer con mi hermano y su pibita al piso, y disfruté muy mucho comiendo mientras ellos tres hablaban de unos dibujos animados muy raros que estaban en la televisión de los que son fan. Tuve tiempo para enseñarle alguna de las cosas de las que he aprendido estos años, y se que lo disfrutó porque ella es muy yo, y me quedé con muchas ganas de celebrarlo con una partida al pro como en los viejos tiempos, pero todo llega igual que llega la vendimia... Por último, me quité una de las muchas espinas que tengo dentro bien clavadas, y festejamos eso de vernos disfrutando un poco de lo que más me gusta del mundo, y esta vez si me prestaron la atención y el cariño que yo requiero cuando me desvisto por completo. He hablado tantas veces sobre lo de cobrar dinero por ofrecer un servicio/producto como puede ser mi música, y cada vez que veo unos ojos brillando cuando estoy rapeando (como también lo estaban los de mi hermano y Marina) me pregunto cuanto tiempo tendré que ahorrar para poder pagar yo eso. Yo cuando rapeo pierdo mi mirada, la pierdo a posta y la dejo divagar, porque es como pintar en directo, y la dejo en el horizonte sola, sin mirar a nadie, viajando por carreteras de Kerouac... pero cuando termino, es como si saliese del trance y volviese al mundo, y entonces es cuando me encuentro con las caras de los que están compartiendo conmigo, y eso es algo que no os puedo explicar por aquí por mucho que me gustaría. Y eso es algo que no pueden ni filmar ni fotografiar, ni encerrar dentro de una aplicación de móvil, y ese es mi tesoro, hijos de puta.



No nos hicimos ninguna fotografía, (ni hubo besos, malpensaos to's, no hicieron falta) porque estuvimos tan felices que a mi se me olvidó por completo hacerlas, y ya saben del valor que tienen esas cosas para mi. Creo que fue también un acto reflejo por parte de ambos para tener un pretexto, una excusa o una razón para volver a vernos pronto, lejos de los claxons y de las cadenas que imponen los horarios. Por si acaso eso no fuese poco, emplazamos a la próxima eso de rememorar viejas batallitas. No me lo dijo, pero se que cuida bien de Garfield, tanto como yo de la serpiente. Y estrujarla haciéndola bola entre mis brazos fue miel aunque fuese despedida y no supiésemos si volverían a pasar otros cinco años hasta un nuevo encuentro bajo este pavimento de cemento. Pero esta vez no di el último achuchón pensando en el siguiente, y eso es tan significativo como que este año que se acaba me ha regalado mucho más de lo que hubiese imaginado y le voy a despedir con flores y música. 







N. Hardem & Soul AM - Perro de ataque

 

8 dic 2014

Capítulo 65: Resistencia arrogante

El rap es vida, la vida es cambiante, nada es perfecto, yo… resistente.










Sin lugar a dudas, madre no hay más que una y más vida que la que me dio el rap, no me la dio ninguna...

¿Y tú que tienes que decir, qué dices, cómo lo dices, que es lo que haces luego de aquello que dices y que haces para apoyar y demostrar que compartes aquello que dicen los que te están moviendo algo por dentro? Para mi, no es música. Me dio por esto como me pudo dar por pintar si hubiese tenido el talento, o por tocar la guitarra, esculpir, o hacer pompas de jabón. El caso es hacer de tu medio de expresión, con tus herramientas, un arte y realizarte mediante ello. Obviamente, mi disciplina me parece la más adecuada para crecer yo y por eso la amo, y sobre todo, vivo acorde a ello demostrando que la amo bajo mi círculo de actuación moral y ético. Cuando escucho a alguien diciendo lo que lleva dentro, le escucho como si fuese ley, y luego ya le juzgo. Cuando escucho a alguien diciendo lo que lleva dentro, lo escucho como si lo hubiese escrito yo, intento analizar porque dice lo que dice, y como lo aplico a mi vida. A mi me la suda sobremanera en primera instancia lo que es la persona. Pero me la suda lo máximo. Yo no me planteo si Kant, Da Vinci o Bècquer eran reales, me la trae al pairo de una manera que ni os hacéis una idea. Me da igual si pensaban realmente todo lo que decían, me quedo con su obra y con todo lo que provoca en mi, con como la puedo encajar en mi vida y si con esos colores puedo pintar mis paisajes. Siempre les estaré eternamente agradecidos, más allá de que Shakespeare luego fuese más o menos hipócrita dado su mensaje, porque me parece lo suficientemente bello como para no ser inducido a juicio por el simple hecho de que lo haya proyectado tal o cual ser humano. Luego ya, si además refuto con datos y opiniones que esa persona, aparte de tener los medios y el talento para sacar a la luz dicho mensaje de una manera que sólo él es capaz, convive acorde al mismo y este a mi me parece lícito y me hace feliz, le tendré en mayor estima y lo podré idolatrar a mi manera, siempre lejos del fanatismo, pero dentro de la admiración que siempre profesaré a gente íntegra y que me hace sentirme orgulloso de ser, ante todo, lo que soy, persona


Y así afronté el rap desde que lo escuché por primera vez. Una serie de personajes anónimos (más o menos persona luego), de las cuales me eran totalmente indiferentes sus circunstancias, escupiendo un mensaje a su manera, con sus medios. Y creo que todos tenemos tanto el derecho, como el deber, de lanzar un mensaje al mundo. Y de pillar del mensaje de los demás para hacer nuestro propio libro sagrado. Para mi, los discos son eso, y los conciertos son eucaristías. Yo no voy allí a colocarme y a vociferar, a estar enajenado y a hablar y desatender cuando alguien está sentando su cátedra. Si no comulgo, no asisto, pero si asisto, respeto y disfruto. Luego los habrá que te lo den para que bailes, para que te creas el mejor, o para que pienses, no todos tenemos las mismas capacidades y, aunque las tuviésemos, no las usamos de la misma forma. He ahí lo bonito, creo yo. Pero ver como todo esto que amo ha evolucionado, y crece, y que para más inri, se está cumpliendo en esta mi cultura aquello de la ley de la atracción, me pone tan cachondo como contento, así como ser partícipe de todo esto en mayor o menor grado, que eso es algo que yo sólo se. Real reconoce a real y así nos conocimos. 


Por eso no me gusta hacer fiestas cuando no se respeta la mía del mismo modo que yo respeto la de los demás, por eso dejo de escupir si veo que algún necio no está escuchando con sus oídos con la misma atención que yo pongo a mis ideas cuando escribo. Cuando no pone el mismo interés que yo en las cosas. Como yo respetaría verle jugar a la petanca si esa fuese su herramienta. Lo siento gente, yo no soy Annie Hall. Morir haciendo esto es mi religión, y aquí no acepto herejes. Sigo siendo radical, esta es mi guerra santa. Me da igual si lleváis New eras o un burka, tribal o carhartt, si eres de Q-bert o de Cut Killer, de Ntm o de Booba, si te gusta Isayah o Duo Kie. Pero si te gusta Duo kie, que sea de la misma forma que a mi Isayah. 


Por cierto, mientras tanto, están cerrando mi movimiento y entro en éxtasis. 



Tengo pensamientos supremos, no gorras...

El corro 02




Me enamoré de una herida, la convertí en mi vida, y mi vida se marchó con otro, que movida... Con la mitad perdida, no preparé la huida, me quedé soñando que se hacía la dormida...


¿Y si estuviera en lo cierto y no fuera para siempre y... encontrara un vientre en el qe dormir caliente? ¿Y si mis dientes se tornaran de marfil... y reencontraran en tus ojos a los labios que perdí? A la gente que quise pero nunca conocí... devuélveme las llaves de las puertas que te abrí.


Subir al cielo, llover en tus pómulos, en la puerta una escoba, la loba de Remo y Rómulo.




Me he encargado de llenar el mapa de minas que estallan cada vez que se me abre una herida y el olor a sangre le llega a los lobos, y sobre todo, las lobas, esas que aúllan en las noches de luna llena. Una de las más potentes y bonitas que coloqué en su día (y fíjense que con el uso de los verbos le estoy dando importancia a mi labor en ello, para no desmerecer que uno a veces tiene mérito y hace las cosas bien) la coloqué en territorio comanche, allá bien arriba, por Catalunya. Se puede decir, que cuando un emperador tiene como meta conquistar un territorio, va asentando campamentos, y que estos, a su vez, cuando se han consolidado, son la base sobre la que se asienta pasado el tiempo las grandes ciudades que luego dotan de historia a un país, esos lugares comunes que antes pertenecieron a otro todo. Bien. Dicho esto, como os digo, allí arriba, puse uno de mis campamentos más importantes a la hora de conquistar mi territorio espiritual. Cierto es que en su momento no valoré como debía todo esto (sin perspectiva y tiempo todo es mucho más complicado), pero por suerte la vida te da mucha cancha y manga ancha para poder desarrollar, llegado el momento adecuado, según que tipo de vínculos. Siempre, y quien me conozca lo sabe y lo puede decir, he tenido palabras buenas y bonitas para esta chica, más allá de que hayamos tenido nuestras rachas. Siempre, he dicho que tengo con ella una relación que conecta en ciertos niveles en los que no he conectado con nadie más aún. No quiere decir que no pueda, simplemente, aún no me he encontrado con nadie que haya entendido algunas cosas que hay dentro de mi y que sólo ella ha sabido empatizar. Sobra decir que espero que llegue mucha más gente de esta a mi vida, o que los que están lo desarrollen, pero hasta el momento sólo lo tengo con ella. No tiene nada que ver con el amor sentimental ni nada de eso, por supuesto. Es algo más energético. Y como no, tratándose de energía, nota siempre cuando estoy más arriba o más abajo de energía, por lo que siempre pongo cualquier opinión que me da en cuarentena, la comparta más o menos, porque se que me conoce mejor que mucha gente, y en una faceta que los demás no lo hacen. Por desgracia y aunque me joda, suele llevar razón. No me jode que la lleve, ojo, me jode que últimamente ha llevado razón en cosas que yo no quería que saliesen así, nada más. Quizás por eso siempre ha sido un baremo muy importante. Me encanta tener el feedback que tengo con ella y la manera en la que nos retroalimentamos últimamente, lo sano que es todo, y los nexos que surgen a nuestro alrededor para con otras gentes. Ha vuelto a acordarse de mi, como ya ha hecho mucho (y prometo corresponder ya mismo, que parece que se vienen tiempos bonitos para servidor) y vuelvo a dejar constancia en mi púlpito de ello. Para más inri, ha vuelto a alimentar esa faceta que compartimos, y de la que espero dar buena cuenta por aquí pronto. Intentaré no tardar. Además, como pueden ver en el whatsapp que me ha mandado, es de esas que me conocen de verdad, de esas por las que sigo dando gracias. Queda mucho todavía, en todos los aspectos, lo se y se que lo sabe. Y me alegro de poder decir que dentro de su lucha interna, que es tan feroz como la mía, sabe ser feliz y lo está siendo al máximo en estos momentos, como sólo nosotros sabemos.



Merci beacoup, madamme.




Hay días y días dicen. Supongo que hay pocos tan bonitos como el dos de Diciembre. Si el ser humano ideó un método que nos permite saber con exactitud en que día vivimos, y lo repetimos periódicamente (más allá de las estaciones) es para que cada equis tiempo tengamos algo que celebrar. Como os digo, el segundo de este mes que encaramos, es precioso desde el efecto dos mil. Así es como yo conozco su venida al mundo. ¿Y que decir? Que es la alegría y el pegamento de la familia. Que cada día que pasa está más bonita por imposible que parezca. Me estoy perdiendo como se hace mayor, y es que lo hace a pasos agigantados, pero es una mezcla de orgullo y amor lo que siento cada vez que puedo pincharle para que salte, que es de las cosas que más adoro del mundo. Nos va a adelantar por la izquierda a los dos varones, como el que no quiere la cosa. Tiene una sensibilidad casi mística, y se los va a traer locos a todos, no ya por lo bonita que es (que no todas tienen esa suerte), si no por todo lo que implica tenerla cerca y todo lo que mueve. Como decía el poeta, ese tipo de mujer que a cada paso que da, deja bajo sus pies la piel hecha arcilla de la madre tierra... Por aquí cantamos bien fuerte como las gargantas en la torcida cada vez que la vemos sonreír. Por cosas como ella uno cree en los milagros, por cosas como ella merece la pena todo aquello que se hace en la vida por encima de cualquier límite de las palabras. Y me flipa que sea de las cosas de la que menos escribo porque apenas me sale nada que se equipare a lo que siento, y ojala así mucho tiempo, será síntoma de que sigue siendo de esas cosas de las que no hacen falta dejar constancia para que no se olviden, las de verdad. Sigo amando y cada día más a la mujer de mi vida que si se pone a bailar acabará bailando todo el bar. Felicidades, socia, por muchos más.













¡Rubén, cabrón, eres el único que faltaste! Te echamos de menos, hermano. Dicho esto, enorme este fin de semana. Supongo que el ser humano dispone días festivos para poder juntarse y celebrar como ser social. Yo doy gracias porque la sociedad se rija por estas pautas, más allá de los motivos que tengan para dejar de trabajar y esas cosas. Hemos vuelto a estar casi el equipo titular al completo, el séquito, y más allá de que haya días que se recuerden más que otros por la cantidad de anécdotas que recopilan, simplemente por el hecho de poder disfrutar de escuchar música juntos, reír, contarnos como nos pinta y brindar, sobre todo brindar, por seguir, son motivos más que suficientes para poner otra pica más en el camino y volver a redondear esta fecha en el almanaque. Luego ya está todo el rollo de que la casa de mi compadre acabase llena de desconocidos a las tantas de la mañana, de que se hurten móviles de última generación (bendito problema el mío con los de vieja generación), de los ¿nada? nada, y toda la parafernalia. Los viajeros que dejaron semillas por Bélgica nos contaron que se llevaron y que se trajeron en su macuto, mi coleguita nos puso al día sobre sus negocios por Béjar, y yo les pude contar que tal en mis no prácticas que como habéis podido ver por ahí arriba, ya si, por fin, comienzo el martes. Volvimos a pasear el jeto por el talego, esta vez mucho más divertido que en pasadas actuaciones ya que volvieron las miradas cómplices, los bailes a pesar de la música, las coreografías de Garry y los chupitos. Se puede decir que hasta se hizo corta la noche y que si todo sigue así, se puede venir una navidad bien bonita. Día completo donde los haya, sin duda, ya que empezó desde bien temprano con mi típica costumbre de unir mundos y hacer que el mío eclosione. Eso si, todo ello me permite disfrutar a la vez de mucha gente que amo mucho, valga la redundancia. Gozar de la presencia de Marina y MJ, Pepe, Gonzalo y Petxu es algo que rara vez puedo hacer de forma individual, así que imaginen lo que supone poder compartir cañas y tapas con todos a la vez. Sobra decir que con Pepe de por medio es imposible no reír y reír, y sobra decir el tremendo cariño que le tengo. Comer con Petxu y recordar el pasado siempre le pinta a uno una tremenda sonrisa en la cara, sobre todo cuando pasas casi más tiempo hablando del presente porque le va bien bonito por la capital. Me alegro de tenerle por mi vida, aunque sea de manera tan puntual, aunque casi me quitase la vida la última vez que me monté con él en el coche, es un grande. Quiero, del verbo ya, muchas más fotos como estas. Son hasta mejores que las canciones, y todo aquello que pueda escribir aquí sobre ello. El mundo necesita más álbumes de fotos y menos internet. 





Otra de las cosas por las que me alegro y de las que me vanaglorio alardeando con vanidad es que sabiendo como establezco los lazos importantes de mi vida, se como la gente con la que los creo los establece a su vez, y por ende, que este hecho implique que de rebote puede llegar a mi vida gente maravillosa. Sólo quiero decir que a estas alturas, y dentro del poco contacto que he tenido con esta chica, celebro sumamente el enorme gusto que tiene mi hermano de letras a la hora de elegir mujeres, y celebro con tanto o más entusiasmo que esta sea la suya, así como el camino que han de seguir, que no me cabe duda que será tan largo como bonito, y yo estaré allí para verlo y hasta echarle instantáneas. No obstante, con poca gente tengo una lista de cosas por hacer que estén tan guapas como pinta esta. Coleguita, me flipa que seas de las que lo mantienen oscuro.


Mäbu - Quédate a dormir


1 dic 2014

Capítulo 64: I'm walking away

Vendía enciclopedias. Con los libros regalaba un microondas, y tras patearse sin éxito varias puertas cerradas, recibiendo indiferencia por las letras, comenzó a hacerlo al revés: decía que ofrecía un microondas y, de regalo, una enciclopedia. Vendió dos. Cobró y decidió dedicarse a otra cosa.


Y mejor respirar que la vida sin resuellos se estrecha, viviendo se quede prestado el que vive a su manera no precisa ni mundo ni montera... Y hoy, mejor se andará, si se quiere menos de lo que se espera. Hoy, hoy, hoy…


Y la suerte de unas cuantas primaveras... Hoy, mejor no esperar, que la vida se me escora con la espera. Caminaré, si mi tiempo se me escapa por las rendijas de la soledad... Caminaré, si no avanzo y me adormezco, es que algo estoy haciendo mal...


En estos periodos uno asume su rol. Quiero decir, dentro de una rutina muy estructurada (tanto que ya no es que esté estructurado el día en si, si no hasta lo que pasa cada día de la semana) uno tiende a adaptarse como un camaleón. Es gracioso, porque si yo adopto esta técnica el que sea que me esté colocando sobre el tapiz es un hijo de puta que está jugando a putear como se putea a los camaleones. Si quieres matar a un camaleón, lo único que tienes que hacer es colocarlo sobre una paleta de muchos colores, y al pobre le da la paranoya y se muere al no poder camuflar su piel en tantos pigmentos a la vez. A mi me pasa un poco igual, parece que tengo que acoplarme a cada ámbito de mi vida (y eso que no he empezado las prácticas aún) y poner una sonrisa en todas partes. Ponerle ojitos a Mérida, estar amable con mis compañeros de piso, en el tenis de mesa, en el curro cuando empiece y los fines de semana más de lo mismo cuando me toca juzgar el cumplimiento de las reglas de un deporte, que va mucho más allá de lo que implica el partido y que refleja el fruto del trabajo de unas personas durante la semana. Si ya de por si no me gusta que me evalúe nadie (y menos aún que se crean en potestad para ello), que decir de evaluar yo, que no soy nadie. Y ya no se si realmente la vida es para estar feliz, para amar y todo ese rollo. Se que es así y todo eso, claro, pero ¿hasta que punto he de aceptar esto y en que momento puedo empezar a ser crítico con todo aquello que me merma este estado y con los que se merman a si mismos esta visión? No hay certezas. Ninguna. Jamás vas a saber el significado real de nada, porque existen las suficientes trabas como para que jamás llegues a entenderte con el emisor de un mensaje:


Y yo a vueltas con la empatía, con establecer lazos elevados, por llamarlo de alguna forma, a estar despierto el mayor tiempo posible. A que alguien entienda lo que quiero decir cuando digo estar despierto. Y entre tanto que, ¿mijo? La vida no es lo que pasa mientras tanto, para nada, eso es la no vida, como cuando Einstein hablaba de la ausencia de dios en cada injusticia y dolor que el mundo sufría. Y todos no vivos, ya que ni siquiera se os puede llamar muertos, para estar muerto hay que hacer algo más que dejar de respirar, y ese un galardón que a la humanidad aún le viene grande. Tengo que asegurarme un porvenir bien ligero para poder dilapidar mi futuro en cualquier pueblecito de no más de mil habitantes en las costas del norte, o con una huerta y una choza en la España profunda. Una guitarra, papel, y algún que otro libro. Y una barca, por si algún día llega Siddhartha.

Y tienen el valor de usar la palabra alma.


Paciente pero nunca ausente que si espero demasiado mi tren se alejara. Me subo a las montañas y con arte y otras mañas pinto piedras y consigo volar. Eso hago, poca cosa,solo busco el perfume en la rosa y del mundo un caminar...



La semana que viene os regalaré algo de música. Creo que voy a dejar de escribir canciones para empezar a entregaros pedacitos de mi en forma de órganos vitales. Lo primero que os cederé probablemente sean mis tripas y mis vísceras, de las cuales ya di buena cuenta el sábado. Otro día os iré dejando mis oídos, mis ojos, y quizás algún día hasta os preste mi corazón. Mi Spíritu ya lo dejé en Galaxies. Y hablando de Galaxies, mi carnal no sanguíneo que anda por tierras sevillanas me ha informado de que a falta de que el hijo de puta de Dare mande el skit, la mezcla del proyecto ha terminado por su parte, sólo le faltan los pequeños retoques y manías que servidor siempre dispone. También faltan por finiquitar algunas imágenes de cada tema (bien está lo que bien parece) pero ya si que podemos decir, por fin, que encaramos la recta final del proyecto. Es más, es bastante probable que esta misma semana contacte con Madrid para informarme sobre presupuesto del tema copias físicas y empezar a mover la maquinaria para su realización. Es la primera vez que voy a compartir algo en lo que he puesto tanto tiempo y pasión (durante un largo periodo) y me embarga una mezcolanza y una amalgama de sentimientos entre los que hay tanta felicidad, como miedo, y vacío. Nostalgia, vergüenza (a entregar algo tan mío) y hasta condescendencia. Qué cosas tiene la música, uno aquí trascendiendo y si me cruzo con un pibe de mi pueblo por la calle lo mismo me dice ¡eh, tú rapeas de eso ¿no?!... La vida puede ser maravillosa. Puede.

Por cierto, que forma más rara de ligar tienen últimamente las mujeres:



Diciembre convertido en un estado de ánimo, sinónimo de estar siempre viviendo con pánico...

Manolo García - Caminaré

24 nov 2014

Capítulo 63: Al bando vencido


¿Tiritas? El aire las seca mejor... además estas sólo son heriditas...

Bonita ¿eh? Me la he hecho yo con una vieja ilusión. Cuando digo que me la he hecho yo lo que quiero decir es que sabía muy bien que podía pasar, no que haya sido yo el que me he infringido el daño. Hacía mucho tiempo que añoraba esto, porque había sido sin duda una de las pasiones de mi vida y hacía mucho que no la disfrutaba, pero también sabía que tenía fecha de caducidad. Aún así me he implicado de lleno, porque es la única forma que tengo de hacer las cosas cuando amo, más allá de lo que me reporte o de que tenga un fin. ¿Pero saben que? Hacía años que no me sentía tan vivo, tan lleno, feliz en el más amplio sentido de la palabra. Ahora tengo heridas, que no hace falta ni mirarlas para que duelan. Que dichoso el azar que siempre hace que los golpes vayan a las heridas... Eso si, alegres y bellas cicatrices, que siempre te acompañan y son las encargadas de recordarte que durante algún tiempo tuviste tu envase completamente lleno. Que sería de mi sin ellas, como no dar las gracias.

Bendito tenis de mesa.

Aunque en este caso, no estoy hablando de eso.


Las semanas, cuanto menos, más. Cuanto menos hay, cuanto más abajo, más valoras el planeo y los buenos ratos. Deciros que ya estoy instalado en Emérita Augusta, y que si hace poco paseaba por la Plaza Mayor de Salamanca, ahora atravieso el puente romano cruzando un Guadiana al que cuando el corazón aprieta le pinto marismas. History in the making. Aún no he podido comenzar las prácticas, dada la bendita burocracia de nuestro país, tan eficaz como eficiente. Pero ya estoy viviendo por el ático con buhardilla más bonito de Mérida. Del 4ºG al 4ºB. Este sitio no tiene tanta magia, pero tiene unas vistas preciosas, ya os las mostraré. He tenido mucha suerte con los compis de piso. Tanto Fran como Santi y Laura son unos tíos de puta madre, con los que se que voy a poder convivir en un ambiente con mucha paz y buenas charlas, y nunca se sabe que tipo de fuerza pueden llegar a tener los lazos que se creen. He gozado de la compañía tanto de Mangy como de DF, y el bueno de GRY va a empezar a trabajar por la capital así que me va a venir que ni pintado, ni escribiendo un guión me hubiese resultado más satisfactorio el destino. También me dediqué a retomar la que antes del rap fue la mayor pasión de mi vida, y que me aspen si no me ha dado más vida de la que me ha aportado nada en años. Volver a adquirir ciertas posturas, agujetas en los oblicuos y dorsales, así como en gran parte del brazo y los isquios sólo son síntomas de haber vuelto a agarrar la Zoran Primorac y haber puesto a bailar la Sriver y la Tackiness D, que me acompañaron en mis años mozos y que están prestando sus últimos servicios mientras decido que gomas nuevas voy a adquirir. Que de vida me ha devuelto el tenis de mesa. Con que ilusión voy cada tarde a entrenar y juego cada bola, ya sea contra el chaval campeón de Extremadura con el que ando enzarzado o con el viejete que va a echar el rato. Y es que el ayer es como arena que se escapa entre los dedos, lo malo no lo olvido, lo bueno me lo quedo, lo demás lo guardas dentro de ti aunque no quieras, para sacarlo a la luz cuando menos te lo esperas... Me han devuelto algo que ni sabía que había tenido, y mucho mejor aún, que ni sabía que podía recuperar. ¿Como no sentirse invencible? (que no invulnerable). He vuelto a arbitrar otro fin de semana más, ahorrando un dinerillo para un proyecto que tengo en mente en 2015 que es probable que me lleve a otra tierra en la que no he tenido el gusto de vivir pero que suena más que apetecible, aparte de las ganas de sacar adelante dicho proyecto. Pero ya os iré comentando... Dejar huella de lo bien que me lo pasé el viernes noche cenando en Badajoz con Mr. Decathlon y su señora y el bueno del Grefu, con el que tuve una conversación a la vuelta a Tierra de Barros que primero me cambió la percepción que tenía sobre él y luego la idea que tenía sobre la manera de afrontar el devenir de dichos acontecimientos por los que todos, tarde o temprano, acabamos pasando. Y ver que no somos tan diferentes, siendo a la vez muy desiguales. Avecinan unas semanas muy bonitas, con posibilidad de cubrir la agenda con cosas que me apetece disfrutar de verdad y en una nueva ciudad, con nuevo microclima, nuevos colores, nuevo y a la vez tan cercano acento, y, sobre todo, nuevas posibilidades.

Ah, he vuelto a coger el bic.

Mírame estoy llorando y no se porqué, quizás ayer fui un borde por deporte y hoy lo recordé, quizás fueron las ruinas que dejé detrás, por eso hoy no le temo al fuego pero si a las cenizas...




Quien me ha visto y quien me ve ¿eh? Debería estar en la mierda. Debería. Es más, hay momentos en los que la presión es asfixiante. Pero donde unos ven derrota, a mi me ha dado por ver oportunidad. Quizás si que había madurado más de lo que había pensado, sólo que uno no elije el devenir de los acontecimientos, si no la mentalidad y actitud con la que los afronta. Actitud me sobra, tanta que hasta suelo prestarla. Sentimentalmente, estoy atravesando el bache más profundo que me ha tocado afrontar nunca. A mi lo de los tiempos es algo que siempre me la ha sudado, por lo que no valoro esta relación que acaba de terminar desde la duración, si no desde la magnitud. Puntos de vista, dicen. Como os digo, esto ha tocado tuétano. Yo hice un hueco enorme en mi pecho hace un par de años, y lo guardé y decoré con mimo para cuando apareciese la persona indicada, sin darme cuenta de que a lo mejor estaban llamando a la puerta y a mi se me había olvidado quitar el candado. Que paradoja, por otra parte. El caso es que me fue muy fácil dejar que entrase un soplo de aire fresco a mi templo, porque además ese viento traía los olores más dulces que jamás había degustado, y para colmo eran familiares. No supuso ningún trabajo amoldarme porque me he vuelto muy maleable, tantísimo que me permito el lujo de hasta adaptarme a enfoques que son totalmente contrarios a mi prisma (¡ojo! que hasta he llegado a pensar que la forma correcta de ver las cosas es la que estaba en el otro bando... válgame). Yo no he tenido que hacer hueco, y entiendo que otros no tengan ganas de hacerlo, pero me da pena que no se valore eso. No que no se valore, ya que obviamente quien no me conozca de nada es lógico que devalúe dicho hecho, si no que conociéndome como se presupone se me conoce se infravaloren ciertas ideas, principios y disposiciones, provoca que una vez pasado el tiempo y enfriándose el calor que se sobrentiende que nunca se debe de apagar, crea una crítica mordaz y feroz a todo aquello que para mi estaba fuera de todo juicio, porque yo por mi mismo lo había colocado por encima de lo moral, sentimental y hasta me aventuraría a decir espiritual. De todas formas, una cosa es querer luchar hasta que no quede aliento, y otra muy distinta es ser gilipollas y no ser consciente de la situación. Que yo para quedarme en paz necesite vaciarme por completo es una máxima que siempre irá conmigo allá donde pose mis pies, sólo que unas veces te vacías más que otras, dependiendo de lo que la meta te aporte, por supuesto. Esto es lo que me permite que a la larga el yugo del pasado no apriete demasiado fuerte, y pueda leer cualquier capítulo de mi vida (redactado o no) sin tener que recriminarme nada. ¿Que me da pena no haber aguantado más algunos momentos? ¿Que he cometido errores? Por supuesto, el que más. ¿Que cambiaría algo de lo que he hecho o dicho si pudiese? Para nada. Sigo pudiendo quedarme completamente desnudo delante de cualquier persona que se me ponga delante, y ya no es que me pueda quedar desnudo, si no que tengo las pelotas de hasta entregarme por completo. Joder, acabo de pasarme el juego y nadie se levanta de la butaca a aplaudirme, todos compadeciéndose de mi y pasándome la mano por la cabeza como si fuese un pobrecito. Sólo les ha faltado pagar a un puñado de plañideras para que me acompañen en el duelo. Quizás era necesario todo esto para 'terminar' de crecer, para tapar grandes carencias y pulir pequeñas virtudes, para fortalecer los cimientos y para asentar primero todo lo que soy, y segundo todos y cada uno con los que puedo contar (con los que ya contaba, y con algunos que no, y con otros que no han podido estar pero que se que están). No mentiré, y cada día al despertarme en lo primero que pienso sigue siendo en ella y en lo que podríamos haber sido, pero hay mucha diferencia de los primeros días a hoy, como tampoco miento si digo que por momentos me estoy recuperando más y más, y que pronto volveré a estar aún más fuerte de lo que estaba antes de todo esto. Tanto que hasta tendré pelotas a mirarlo y sonreír, y como dicen ustedes 'recordarlo con cariño', como si hasta hoy no hubiese sido la relación más importante de mi vida, como si me la sudase vaya...



Ceerre - 1312